viernes, 3 de junio de 2016

Diario de un "Ascenso" (6): vuelta a las andadas

Jueves 2 de junio de 2016

11:30h

Suena el teléfono. Está en una esquina de la mesa, la pantalla tapada por la cpu en vertical, así que cojo ignorando quién llama. Un diga sale despreocupadamente de mi boca. Error. Es ella. Abrí la puerta el otro día y no ha dudado en cruzarla, lo que me extraña es que haya tardado tanto. No he sido sincera. No he mentido pero sí he ocultado información. Cuando me llamó el otro día, me dio tantísima pena que me ofrecí a traerle jabón casero. ¡MEC! Sí, lo sé, fue un error que ya estoy pagando. Cuando se lo llevé (sí, encima se lo llevé, alimentando aún más su fantasía de pulgas en la moqueta) tenía para mí una trampa para hormigas, para combatir a las que entran cada año en mi casa. No, no. No es que yo no sepa comprar exterminadores de hormigas, es que su trampa es muchíiiiiisimo mejor que cualquier otra que pueda comprar. Salí de allí con una mezcla entre cabreo y pena que me gustaría no sentir más, sobre todo lo relativo a la pena.

Vuelvo a la realidad tras los recuerdos. Me cuenta que hay una conjura contra ella en la empresa. Es la única secretaria a la que no le cancelan las guardias. Es cierto, en parte, pero es lo que pasa si te metes con la persona que organiza los turnos. No solo me llevó a mí al borde de la locura y, cuando vences a personas que son superiores a ti en la empresa pero no mueren, puedes tener por seguro que habrá consecuencias. La clave de esto es que ellas (la jefa de las guardias y su secretaria) la están martirizando, pero cuando la Rotten las machacó era por una buena causa porque ella es perfecta y no comete pecados.

Voy a desconectar un rato.

11:45h

Entran en escena las pulgas. Al fin ha confesado que no fue al último curso de formación para secretarias porque había moqueta. En el penúltimo se quedó sentada en el pasillo, así que casi es mejor que no asista. Sigue con que la empresa le creó ese problema y encima la están tratando fatal y termina con una conspiración aún mayor que la de las guardias. El dueño de la empresa de fumigación es marido de una compañera, Inés, que ahora está super cabreada porque la Rotten habló mal de esa empresa y está moviendo hilos para acabar con ella. Inés tiene un cargo intermedio, así que no sé si tendrá poder suficiente para acabar con la Rotten. Volvemos al punto de salida: no ha cabreado solo a esa mujer, le ha tocado las narices a mucha gente y aun así sigue teniendo un puesto de trabajo aquí. El problema es que nadie en la empresa, nadie, se atrevió a decirle nada. Sí, vale, algunos le dijeron que no había pulgas, ¿pero alguien le dijo vete al médico y luego hablamos?

12:10h

Madre mía, cuarenta minutos ya. Me está contando que el otro día fue a administración. Allí tienen la moqueta que más daño le hace, la sintética. Salió con dos larvas encima: una en la falda y otra en el zapato. En el supuesto de hubiera pulgas en ese edificio, puedo entender que una larvilla se quede pegada al zapato, pero ¿cómo llega a la falda? ¿Se rebozó por el suelo? No sé si sabe que las larvas a) no pueden existir sin adultos (y ella jura y perjura que ya no hay adultos, solo larvas) b) no tienen patitas para saltar.

Para evitar meterlas en su oficina y en casa sigue un ritual. Antes de entrar en la ofi sacude todo. Lo que no me ha quedado claro es si se queda en pelotas en las escaleras. En realidad, sabiendo que el italiano buenorro trabaja en el piso de enfrente y puede aparecer en cualquier momento, yo también intentaría desnudarme a las primeras de cambio. Al salir, vuelve a repetir la operación para no llevárselas a su casa. Sobre acariciar perros extraños y meter las manos en arbustos cochambrosos tampoco dijo nada. 


Viernes 3 de junio de 2016

11:30h

Suena el teléfono a la misma hora de ayer. ¿Será posible que…? ¡Sí! ¡Qué horror! Vuelve a acosarme. Tengo que tomar medidas. Voy a poner un post it en la cpu: “Mira el teléfono antes de descolgar”.

Me llama para decirme que efectivamente, tiene guardia mañana. Y no solo no se la han perdonado sino que cierran también el edificio al que la mandan últimamente y le toca trabajar en un tercero. ¡Uf, qué rollo! Voy a decirle que no puedo seguir hablando. Es cierto, estoy a tope y no puedo pasarme otros cuarenta minutos en este plan.

“Ay, Doroty, lo siento, tengo que dejarte que están llamando a Álvaro Ríos”.

Mierda, se me ha adelantado. Hasta en eso tiene que ser la mejor.

6 comentarios:

  1. Me gusta el humor diferente que usas creando tus textos
    Te envidio
    en mi mente siempre
    escribo corto
    quizas algun dia p
    pueda escribir más

    Un abrazo

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    1. Nada de envidia! :) Tenemos que escribir lo que nos haga sentir cómodas. En realidad a mí me gustaría meterme con una novela pero no consigo escribir más largo que esto. Aunque si lo pienso... no hay que dejar de intentarlo :) Un abrazo enorme.

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  2. Como diria Shakespeare "algo huele a rotten en Dinamarca". Pero este extraño poder de en ocasiones ver pulgas(en todas las ocasiones) debería haberla llevado al paro hace tiempo. Y ahí sigue. Como en tantos trabajos donde los sanos trabajan doble y cubren a los enfermos. Es una ley de la compensación que sucede todo el tiempo en las empresas. Aunque la rotten caerá algun dia. Degenerará y cuando vea pulgas o cucarachas o larvas de elefante en la cabeza de la persona equivocada...será el principio del fin. Me gusta tu trabajo. Pero solo porque lo leo. Prefiero que lo vivas tu. Besos

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    1. No sé qué decir, S. Creo que mi jefe (que era el suyo) la protegió muy bien. Ahora está poco menos que en un rincón y molesta menos, así que si no la echaron hace un año... En una de esas llamadas me dijo que le quedaban cinco años para la jubilación y, si no se por voluntad propia, creo que terminará. Menos mal que ya no la sufro como antes!

      Jajaja, qué morro, pero no me extraña que prefieras no vivirlo. Besos

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  3. Cuantas veces nos encontramos con realidades como las tuyas
    donde no entendemos nada
    Pero asi es la vida
    y mientras las sigas escribiendo seguiras creciendo
    limpiándote el alma
    ya que lo que escribes lo tiras al universo
    y el dia así, se vuelve mas claro
    besos bella compi

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    1. Sí! Seguro que hay más Ascensiones por el mundo adelante, es triste :( Lo bueno es la terapia exteriorizándolo a través de la escritura, qué bonito lo has dicho.

      Besos

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