lunes, 4 de febrero de 2019

Diario de Jekyll (3): Los berrinches de la Pestes

Miércoles 23 de enero de 2019

9:50h

Entra la Pestes quejándose de que dar clases le absorbe mucho tiempo. Ni hola, directa al grano. El idilio le ha durado poco. No la escucho, sus cosas personales me importan menos que cero. Sandra aguanta estoica. No sé qué puede sacar de esto, pero ahí está como una roca. BLA BLA BLA BLA. Un tema más para añadir a la lista de quejas.

11:30h

Me voy al descanso. Antes comía algo en mi mesa, ahora intento salir siempre porque desconectar de la oficina, de la gente, es vital para continuar. Aunque ahora está “tranquila”. La Pestes se ha largado hace ya un buen rato. En unos días tiene una visita guiada con sus estudiantes y ha ido a la galería a hacer esa visita para prepararla. Nuestra jefa no sabe nada, de hecho, invitó a Sandra y finalmente acordaron que mejor no. Sandra tendría que pedir permiso y se descubriría el pastel. Con la conflictiva fuera, se respira de otra manera.

13.30h

Dos horas y media de tranquilidad. Algo es algo. Nunca nos da tanta tregua. Llega cargada de regalitos cutres de su visita intentando darle envidia a Sandra. Yo ni me quito los cascos.

13.57h

Empiezo a comer, esta vez en la ofi. Tengo inglés y suelo comer en mi mesa para adelantar algo de trabajo. La imbécil de la Pestes me hace un comentario sobre mi comida que pretende ser hiriente, pero me entra por un oído y me sale por otro. Entre pasar de ella y de sus regalitos y ahora esto, veo que empieza a cabrearse. Lo oigo, más bien. Portazo por aquí, portazo por allá. Y otro portazo más. Y otro.

Llama a su amiguita Carlota para comer juntas. Okupan la oficina de al lado. Le hace un comentario convencida de que es un chiste y me mira riéndose sola para que me ría con ella. Ni la miro. Ella no me aguanta. Cuatro portazos más mientras va y viene de la mini ofi al sitio donde comen. Por muchos portazos que dé no pienso reírle los chistes en conversaciones ajenas.

17:40h

La tarde ha pasado rápida. Siempre es así el día de inglés. Llego pasadas las cuatro y media. Entre preparar la lista de salas del día siguiente para las chicas de la limpieza, contestar un par de emails, intercambiar un par mensajes con Circe y tomar algo para la merienda, hora de salir.

Hoy tengo fisio así que empiezo a cerrar cosas y a recoger para salir a menos cinco. Noto cómo la Pestes se pone tensa.

17:53h

Está viendo que estoy recogiendo, que estoy cerrando la mochila, que estoy a punto de coger el abrigo. Le da igual. Salta sobre mí como una depredadora. Me va a enviar un email para que le explique. El plazo termina mañana. ¿Mañana? Sí, es que el email original de la cadena es del dieciocho (18) de octubre. No hace falta que diga de dos mil dieciocho (2018). Pretende que le resuelva eso ahora, cinco minutos antes de mi hora de salida. Algo de octubre. ¡Ja!

Mira, Pestes, mañana lo miro con calma y te digo algo, que me voy a fisio.

Sé que es en venganza por pasar de ella. Sé que le molesta que esté saliendo a mi hora. No le hubiera dado explicaciones si no la creyera capaz de contarle una mentira a nuestra jefa. Soy muy cortada para muchas cosas, pero no soy Sandra. He cumplido y tengo vida y no voy a pagar que la suya sea una mierda.

Me largo y la dejo ahí plantada.

6 comentarios:

  1. Me estaba riendo. De verdad que lo estaba haciendo. Pero es que la parte en que recoges y te vas y ella, como mucha gente que conozco, pretende que te quedes a última hora por una tontería... Arrrgh me ha encendido como si me pasase a mí. Menos mal que has dado la respuesta más perfecta. Un pretexto como fisio o como lo que quieras, eso da igual, y hasta mañana. Tu jornada es muy larga de por sí y la vida muy corta para regalársela a esta mujer. Por cierto... ¿Es vengativa? En fin, mucho ánimo.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Pensaba que no era vengativa, pero justo esa pretensión era su venganza por haber pasado de ella todo el día, así que estoy con las alarmas encendidas desde entonces. Si no hubiera tenido fisio me habría ido igual. No solo es que la jornada sea larga sino que ella se la pasó de parranda. Luego al día siguiente llorando: ay, es que me tuve que quedar hasta las nueve. Solo hay que sumar, pero bueno, paciencia, si no de aquí me toca ir a terapia directamente.

      PD. Ríe lo que quieras. :D

      Eliminar
  2. Tengo un amigo que trabaja en una gran empresa,empieza a las ocho a trabajar, come allí mismo en la oficina o en el pequeño bar que tiene la misma empresa y termina o debería a las 5.30h. Pues casi nunca puede salir puntual pq el tarado de turno o el jefe de sección que es un tipo que llega a las 11 de la mañana a trabajar les pone reuniones a partir de las 5 y pico...
    Yo es que me sube la bilirrubina!!!!! Eso es cagarse en el tiempo de los demás y en su trabajo. Lo que tu dices siempre, si ellos tienen una vida de mierda y no quieren volver a casa es su problema pero parece que esa clase de personas les encanta joder a los demás.
    La manera es esa, ser inflexibles. Uno ya hizo su trabajo y el día termino.
    Evidentemente siempre puede haber algo urgente y tienes que fastidiarte,pero con el tiempo uno ya distingue lo urgente de lo hdp...
    Bravo Dorotea!!!! Estás consiguiendo tus propósitos de a poquito!!! Te felicito! Qué sepas también que tus cambios les molestará muchísimo. La condición humana es un asco y la de las malas personas más...así que a ver con lo que vas a tener que lidiar más adelante. Que esta gente son generosamente malvadas...ah! A estas me gustaría preguntarles si son de las que en sus redes sociales también ponen el "yo sí te creo" "yo soy tu hermana" ....porque sería para pegarles una bofetada bien dada con la mano bien abierta y que les retumbara el cerebro por malas e hipócritas. Grrrr... Es que me pongo enferma...🤮
    Nada!!! Tu sigue así!!!!!
    Besazos ssssssssss

    ResponderEliminar
  3. Sí, exacto. Yo cuando me quedo es por algo mío que tengo que terminar. Porque a veces hay fechas de entrega puntuales a las que no se llega. Pero estas desconsideraciones, no. Es más, no se las tolero ni a mi jefa. Sabe que a menos cinco no me puede pedir nada.

    Jajaja, me hace mucha gracia tu mensaje, Maman. A mí también me ponen enferma porque al final con esta actitud van de guay con nuestra jefa: mira qué buenas somos, que nos quedamos hasta tarde. Y se ocupan muy mucho de hacerle una llamada o enviarle un email para que sepa que siguen en la oficina a deshora. Y yo como siempre, la oveja negra. Pero mientras no paguen las extras, que no cuenten conmigo para recortarme tiempo de vida.

    Un abrazo enorme y gracias por tus ánimos. MUAC

    ResponderEliminar