jueves, 8 de octubre de 2020

Covid-19, Diario de un encierro (17): En casa otra vez

Lunes 28 de septiembre de 2020

Hoy he ido a la oficina, pero he dejado todo más o menos organizado para no volver en dos semanas. Aún tendré que ir a clase de inglés, pero por lo menos voy a dejar de frecuentar ese edificio en el que aparecen casos de covid-19 como setas. Están empezando a alertar del peligro de los aerosoles y la gente llega a sus oficinas y se quita la mascarilla. Ahora mismo todas las oficinas están compartidas por turnos, por mucho que limpien las señoras de la limpieza, si no ventilan (y está claro que no lo hacen, visto lo visto) y el siguiente en entrar también se descubre, ¡zas! Diana.

La Rotten y yo nos enteramos de que Gema, una compañera de la tercera planta, también está enferma. Lo peor de esta mujer es que llevaba al menos una semana con síntomas y no fue al médico ni le dio importancia. Fue a comer con su familia a casa de sus padres, a una reunión de departamento, recorrió las instalaciones porque ella es quien lleva control de dónde se sienta todo el mundo y, si no llega a ser por Marisol/Marinube que le comió el coco para que fuera al médico, seguiría todavía como Perica por su casa por ahí.

 

Martes 29 de septiembre de 2020

Volvemos a las reuniones de departamento. La de hoy ha sido larguísima por un tema que mi jefa tenía que hablar con las secretarias. Yo sobraba desde el minuto cinco, después de que me comentaran que había un nuevo caso de covid-19 en el edificio donde trabajo y me preguntaran si había coincidido con él (sí).

Este último contagio es el de un tipejo que hace lo que le da la gana e, igual que fuma puros en el trabajo, va sin mascarillas por ahí. La semana pasada le abrí la puerta y la llevaba por debajo de la nariz, al borde justo del labio. Y tuve suerte. Marisol/Marinube coincidió con él en el pasillo, le llamó la atención por no llevarla y él le protestó diciendo que era una exagerada. Estos dos encuentros fueron hace una semana y ya estaba contagiado. Ni Marisol ni yo tenemos síntomas, por suerte.

 

Jueves 1 de octubre de 2020

Sigue la guerra fría entre el gobierno central y el autonómico así que muchos de nosotros seguimos pendientes de si la Comunidad de Madrid acatará la orden ministerial y entrarán en vigor nuevas restricciones para toda la comunidad, si la recurrirá o si directamente se lo pasará por el forro.

A través de Marisol/Marinube hemos sabido que Gema se encuentra peor y que se lo pasó a su madre, a su hermano y a su cuñada. Y están esperando los resultados para su sobrino de seis meses.

Sigo sin síntomas.

 

Viernes 2 de octubre de 2020

Me ha llegado el certificado de la empresa para poder ir a trabajar. Antes de volver voy a controlar cómo van las cifras de contagios, tanto en la región como en el edificio donde trabajo. Quizás pueda volver en dos días si todos los que trabajaban allí se contagian y se quedan en casa. La empresa está haciendo muchos esfuerzos para detectar y aislar contagios en la mayoría de edificios, los que están abiertos al público, pero siguen sin avisar de que ha habido varios contagios en ese edificio. Está claro que tampoco pueden poner a un vigilante de las normas. Está en nuestras manos protegernos y proteger a los demás. Allá cada quien con su conciencia.

A pesar de que estoy segura de que mi decisión de reducir mis viajes a lo mínimo es lo más sensato, me reconcome por dentro el deseo de salir de mi burbuja de ladrillo, respirar contaminación y relacionarme con gente.

Probablemente esto es lo que nos tocará durante una buena temporada. Abrir, cerrar, prohibir, permitir y convivir con el virus. Todo un aprendizaje. Aunque la sensación que me queda de todo esto es que hay quien no aprende, que en compensación otras personas nos sacrificamos y que al final el resultado ni siquiera será satisfactorio porque los muertos siguen subiendo.

 

10 comentarios:

  1. Recrudeciendo la cosa, donde vivo también, lo último que oí es que aquí habría una cepa del virus más agresiva, ya no sé que creer. Un abrazo

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    1. Sí, se está poniendo mal en todas partes. El otro día creo que leí que por aquí no había mutado, pero ya tampoco sé que creer, la información va demasiado rápido.
      Un abrazo.

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  2. Cachis que está durando esto. Debes vivir en Madrid, por lo del certificado para ir al trabajo.

    Paciencia, porque está siendo muy largo esto. Por la tranquilidad en laficina :-). Un abrazo

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    1. Lo tenemos para tiempo. Aún recuerdo cuando empezó que mucha gente me decía "bueno, en otoño, cuando volvamos a la normalidad". Y yo les decía, qué normalidad, no vamos a volver a lo de antes, y me ponían los ojos en blanco...

      Paciencia, que el camino es largo.

      Un abrazo.

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  3. Que triste seguir leyendo estas cosas. En Argentina íbamos bien pero la presión de la gente por salir hizo que la cuarentena sea una ridiculez y tengamos casos récords todos los días. Increíble. Una lástima seguir así en todo el mundo. O por lo menos en los lugares donde la gente es necia, hay que reconocerlo. Saludos.

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    1. Aquí pasó algo parecido. Se hizo la apertura muy rápida y se permitió demasiado aforo a los bares y restaurantes. aunque está repuntando en todas partes. Y bueno, luego la gente inconsciente, que no creo que sea mayoría, pero la arman.
      Un abrazo.

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  4. El caso de Gema que va a comer con sus padres con síntomas me ha llegado al alma. Más bien me ha encolerizado pero la cólera también la tengo en el espíritu. ¿En serio hay adultos así? ¿Todavía?
    Tu reflexión final es la que podemos subscribir los que sí tomamos medias siempre. Palabra por palabra. Qué impotencia. Un abrazo

    p:D. No dejes de informar de que estás bien. Por muchas medidas que uno tome estamos rodeados de peligro. Yo nunca estoy seguro de que no lo tenga por culpa de alguien que se salta la distancia, la mascarilla y hasta la buena educación.

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    1. Hola, S.:Para mí has dado en el clavo con la última frase: la buena educación. Porque podemos pensar que no estamos enfermos y quizás no lo estamos, pero los demás no lo saben. Y bueno, sobre lo de las casas de los padres y demás familia... no nos damos cuenta de que el virus no entiende de casas de padres. No sé cómo les irá a los pobres. :( La verdad es que sí, es una impotencia

      De momento bien... al menos del virus. :)
      Besos.

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  5. ¿Cuántos meses llevamos con el Covid? ¿Te parece normal que a la mayoría de la gente que entrevistan por la calle los reporteros sigue llevando la mascarilla por debajo de la nariz? Puta mierda de ignorantes (que luego votan).

    Si no te vas a relacionar con gente entonces no te podré hacer una visita :-(, pero bueno, al final me vas a dar una patada previa, jajaja.

    Un abrazo, Doroteíña

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    1. Jajaja, tü puedes visitarme cuando quieras.

      El tema mascarillas es que es un caso aparte. De todos modos no deja de alucinarme cómo países donde no se lleva tanto tienen menos contagio que aquí. En fin, cuídate.

      Un abrazo.

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