Lunes 20 de abril de
2020
Revisé mi bandeja de
entrada nada más empezar y tenía un email de la persona que provocó la avalancha
de emails en Semana Santa, una persona que depende del departamento de
Verduras, pero a la que tengo que orientar como favor hacia ellas (aunque ellas
nunca me lo devuelven). La información que le daré, cuando llegue el momento,
será sobre un proyecto que va a gestionar, solo un par de detalles sobre los
primeros pasos, los puntos en los que debe enfocarse y los que debe reforzar.
En el email que
tengo en mi bandeja de entrada me ha contado toda su vida: que si se ha mudado
de casa; que se equivocó en poner una dirección; que su DNI caduca en un mes…Ni
que yo trabajara en una comisaría. Termina diciéndome que tiene problemas con
la solicitud de su Cl@ve pin*, que si le puedo ayudar. Ni que yo trabajara en la
Agencia Tributaria. A continuación me envió un segundo email donde me pregunta
si tengo algún contacto en la institución que evaluará su proyecto, a ver si le
pueden solucionar lo de la Cl@ve pin. Le dije que no le puedo ayudar, que debe
ponerse en contacto con la Agencia Tributaria. No sé por qué cree que la Cl@ve
pin es una invitación para comenzar el proyecto. En serio, hay gente que está
en el mundo sin cabeza, sobre todo porque se suponía que perteneció a la
“élite” de la empresa donde trabajo hasta que se cambió de ciudad. Se puede no
saber nada sobre el tema de la Cl@ve antes de solicitarla, pero no hace falta más que leer un par de
líneas en la web donde se solicita para saber lo que es.